martes, abril 11, 2006

América 1-3 Pumas

Glorioso día para todos los Pumas en todo el mundo. El triunfo sobre el América únicamente es superado al conseguir un campeonato, por lo que hasta este momento la afición estará contenta que ante el archirival no únicamente no se perdió, pero se le dominó.

Este partido no pintaba muy atractivo. Ambos equipos venían cargando malos resultados, pero lo más importante un mal funcionamiento. Pumas venía de vencer a nada más y nada menos que el líder del torneo en casa estrenando técnico y ahora se tenía otra prueba más para determinar los futuros. Y a parte de ser un partido de muerte y orgullo entre ambos equipos, también significaban puntos valiosos con miras a una clasificación a la liguilla.

Ambos equipos iniciaron sin tanto ímpetu por irse arriba rápido en el marcador. Prefirieron cuidar el cero en las porterías, pero tampoco se negaron en conseguir jugadas de peligro. Por momentos la balanza parecía más inclinada hacia el América teniendo llegadas como un remate de Kléber que se estrelló en el travesaño. Pero los Pumas parecían más destinados el contragolpe y así fue como consiguieron su primera llegada de peligro con un tiro que llevaba todas las de gol por parte del Parejita que detuvo el arquero rival.

El partido se empezó a dividir en choques en la media cancha. Ningún equipo parecía poder avanzar y sin jugadores que pudieran distribuir el balón se empeñaron en utilizar la velocidad y las bandas, situación que mayor beneficio le dio a los Pumas ya que el al minuto 23 lograron hilvanar una buena jugada que terminó en un centro de Botero que el Parejita remató casi sobre la línea para hacer retumbar el Estaido Azteca con un Goya y decretar el 1-0.

El primer tiempo se volvió entoncés en un dominio de Pumas que más se dedicaban a trasladar el balón de un lado al otro asegurando su control y no permitir que el rival pudiera tomarlo para generar alguna jugada que preocupara de más a la defensa auriazul.

Para el segundo tiempo el América se vio más agresivo con la entrada del "Piojo" López, aunque poco a poco la buena marcación de los Pumas maniató al rival que no podía lograr jugadas de gol. Los Pumas ya se veían de nueva cuenta controlando el partido y Memo Vázquez preparaba un cambio para enfriar todavía más el asunto y lograr mayor control del balón y mayor presición en sus contragolpes, pero tras una falta, el "Chaco" Jímenes mandó un fuerte centro que alcanzó a rozar Ismael Rodríguez para empatar el partido.

Esto pudo haber desanimado a los Pumas, pero lejos de pensar negativo con el regreso de Ismael Íñiguez y de Héctor Moreno por Botero y Toledo los Pumas se renovaron en energías, lograron más orden y mayor control del balón. Ahora si se puso bueno el partido y ambos equipos se vieron envueltos en idas y vueltas siempre intentando generar jugadas de peligro, con Kléber como el villano y Bernal como el héroe en un cabezaso a no más de 2 metros de distancia que con grandes reflejos sacó el portero universitario.

Al minuto 70 se marcó ya el rumbo del partido con una buena jugada de contragolpe en la cual el Parejita mandó un buen centro para que Marioni se lanzara y con la cabeza sacara un potente remate que terminó (por fin) al fondo de las redes. Con este momento emotivo con el cual se vuelve a encontrar con el gol, empieza a volver a caer en gracia a los aficionados auriazules, pero lo que parece más importante es que celebró como grandes amigos con el DT felino.

Poco después parecía que con la expulsión de Irenio los Pumas se verían con mucho mayor peligro frente al rival, pero más bien el América logró acomodarse mejor en el campo, pero los Pumas nunca perdieron el orden ni la idea y todavía en una jugada a balón parado Israel Castro logró el 3-1 definitivo.

El partido más que el triunfo se debe de rescatar la actitud y la idea con la que se ve el equipo. Unos Pumas que de nueva cuenta se ven con la cara en alto en todo momento, el nerviosismo y la falta de organización y de idea futbolística han quedado atrás y ahora todo es buen funcionamiento y mayor enlance entre líneas. Al parecer Memo Vázquez ha hecho una buena labor y ha encontrado como motivar y hacer entender de su estrategia al equipo de nuestros amores. Los cambios en este partido fueron atinados, y aunque la entrada del Cachas y de Moreno eran para otra cosa, supieron responder ante el rápido cambio de situación, mientras que Morales supo aprovechar el momento e intentó hacer grandes cosas. También cabe resaltar que fuera del Cachas y los 4 extranjeros, los demás jugadores son salidos de la cantera universitaria.

De los 14 participantes como en los últimos años Bernal tuvo una gran actuación sacando dos remates de Kléber que llevaban etiqueta de gol. La defensa se vio todavía más segura y más determinada. Parece que el Verón aguerrido y concentrado ha regresado, con un joven como Jehu Chiapas que se está haciendo su lugar por la banda izquierda. Una media encabezada por el incansable Leandro y un renovado Parejita. Arriba Marioni y Botero muy participativos pero por momentos muy erráticos.

No hay que echar las campanas al vuelo, pero parece ser que los Pumas aguerridos, agresivos (futbolísticamente hablando) y ofensivos ha regresado. También por fin parece que un técnico respetará los fundamentos universitarios jugando con jugadores de la cantera.